martes, 3 de noviembre de 2009

coerción

estoy hasta aquí de intentar enderezar a mi mujer, si bien es lo único que me hace sentir completo en esta vida, estoy al momento, como se dice sin reparos, con las bolas al plato!
se ha metido en préstamos, hipotecas, clases de canto, universidades, planes de apadrinamiento, dietas, grupos, clases particulares, ha tenido amoríos con hombres, con mujeres, ha sido procesada, encarcelada, excarcelada, inscripta, miembro de, parte de, representante de, única presente a multitud de conferencias pensadas para multitudes y así y así siguiendo, puedo estar horas.
Ahora ha tomado la manía de cocinar sin sal y de juntar folletos para armar pequeñas esculturas de con tijera y pegamento que intenta luego vender en las ferias de arte también llamadas mercados de arte o intercambio de galerías y que se yo que veinte cuernos, con las esculturas está haciendo la mar de dinero y con eso se paga los cursos, hipotecas, clases de canto, etc, y se da tanta autoridad que cada cosa que dice se me clava a un costado del cuello y se arrastra con porfía hasta el otro costado abriendo una grieta sanguinolenta que me hace caer la cabeza hacia atrás hasta que cae, desgarrada rompiendo mis huesos, quedo hecho una mugre, con la herida abierta roja y ocre y los dos músculos esternocleidomastoideos picudos como pequeñas montañitas. No llego siquiera a encontrar palabras para expresar lo poco que me gusta el reciente cambio de dieta, por no traer a la mesa de discusión mi rebajadísima situación en la pareja, o disección o dibisección ya que ahora tengo a mi mujer no sólo a mi lado sino arriba y todo alrededor.

Pero está bien, si van a devorarme tendré la venganza de la manzana, que deja deslizar al tracto digestivo una semilla disimulada de gargajo que se incrusta en el corazón y crece lentamente hasta que el pobre infeliz que se sentía muy aventajado al hincarle el diente se desayuna que nada lo separa de un triste abeto. Y desde el mismo núcleo voy a torcer a mi mujer hacia la buena senda, voy a enderezarla desde la no acción de mis extremidades, la no contracción de mi músculos faciales, mi no respiración no erección no nada. Desde mi profundo vacío voy a llenarla de angustia y voluntad truncada de cambio, ya van a ver yo estaré ahí y seré su no se que me pasa y su hay algo que no me convence, y cuando vean al cielo buscando una explicación seré la mierdita que nunca pensaron que podría ser, la causa que no sospecharon que sería. Porque si hay algo en lo que sobresalgo en esta vida es en cagarle la vida a los demás, y si para hacerlo tengo que volverme uno con la más fina materia de este intrincadísimo universo que así sea.

1 comentario:

gomebigge. dijo...

esto es brillante ademas aprendi la palabra abeto