I se encuentra con B y le pregunta por Joyce, están en un bar. B se toma su tiempo, apaga el cigarrillo, mirando por la ventana se encoge de hombros.
- Hace tanto que no lo veo.
I lleva su trajecito de salir, asiente y se toca la barriga. Luego juega con el azúcar.
- ¿Y se sabe si va a venir?
B saca una cigarrera de su bolsillo, la pone sobre la mesa, la abre. I observa los cigarros, se acerca a olerlos, muestra una sonrisa.
- ¿Quiere uno?
- No, gracias, hace mucho que no fumo.
- Estamos sólos en el mundo.
I se mira las manos, las toca con detenimiento, medio detenimiento al principio, luego completa concentración.
- Hay momentos en que me parece oírlo, su murmullo contínuo aquí, justo aquí.
- Yo no llegué a cambiar muchas palabras con él. Un tipo extraño.
I termina su café, se pone de pie, se saluda con su compañero.
- Creo que voy a dejar aquí por hoy. Mañana podemos continuar charlando.
B lo observa y asiente.
- Ciertamente.
I parte, pasa un tiempo. Las luces se apagan, B sigue ahí, con su rostro marcado por la angustia le dice a las sombras:
- Está aquí, aquí mismo.
Se hace la completa oscuridad, un arullo femenino llena el espacio. Una silueta oscura parece recorrer el bar en distintas direcciones.
Primera fiesta de cumpleaños
-
Estoy en mi nuevo trabajo, que me gusta mucho.
Ojo, igual me re concentro.
Hoy veré la final de la Libertadores.
Estoy muy entusiasmada con ese partido.
Lu...
Hace 10 años